domingo, 26 de febrero de 2012

Por la vía rápida

En primer lugar, extiendo mi sentido pésame a los familiares de aquellos que fallecieron el pasado miércoles 22.
Por otro lado, ¿es necesario que salga el Secretario de Transporte a decir tamaños disparates? ¿Acaso no hemos aprendido de la tragedia de San Miguel? En la cual el motorista está procesado, pero no se ha avanzado en la investigación sobre la empresa ni en la falta de controles del Estado.
¿Era necesario que Schiavi dijera que si hubiera ocurrido el martes habría sido menos traumático? Siento, lamentablemente, que nos toman por imbéciles, y será que es cierto. Somos una retahíla de idiotas, pues están quienes votaron este mismo gobierno, en este contexto, y sin conciencia de los conflictos que se avecinaban. También los que no lo hicimos, sin embargo, pagamos justos por pecadores.
Resulta que debemos conformarnos con el hecho somero, de que en otros países también ocurren accidentes ferroviarios. En canales oficiales comentaron que la culpa es de Menem, que destruyó los FFCC en la década infame (entiéndase lo ´90). No obstante, el kirchnerismo está en el poder desde 2003 y el servicio de transporte masivo (porque no es público) no ha mejorado. Contrario a esto, se viaja cada día peor en trenes y colectivos sobre todo. Pues el Estado está ausente, por terrible conveniencia, un Estado corrupto y con intereses espurios. La empresa, TBA [la misma a la que Luis D’Elia les incendió la Estación de Haedo, en un “justo reclamo por DDHH”- y está libre-] lamentó el accidente y comento al pasar que investigarían los hechos, ¿se investigarán así mismos? Les recuerdo que es la misma empresa que está involucrada en coimas al ex Secretario de Transporte, Ricardo Jaime. Quien dicho sea de paso, habría firmado las licitaciones del Tren Bala (Buenos Aires Rosario) y del Tren Rápido (Constitución- Ezeiza), en 2006 y 2009 respectivamente.  
No sé qué más puedo agregar. A veces me parece que nado contra la corriente. Reitero mi pesar a aquellos que han perdido familiares y amigos, y hago una plegaria porque se asuman las responsabilidades políticas y civiles, pero sobre todo que hagamos un llamado a reflexión acerca de quienes nos gobiernan, su legitimidad y eficiencia.
Hasta la próxima.