miércoles, 20 de octubre de 2010

¿Pozo sin fondo?

En los últimos días mucho se hablo a cerca de ANSES, jubilaciones, fondos y demás. La semana pasada el congreso sancionó un 82% mínimo que beneficiaria a unos 5.000.000 millones de jubilados, sino más, que fue vetada por la presidente con una velocidad de gestión pocas veces vista.
De manera casi evidente, el Estado Nacional gasta más de lo que gana. La enorme cantidad de subsidios a expensas de los aportantes, es cuantiosa. A la fecha se han utilizado fondos de ANSES, de las AFJP y reservas del Banco Central (BCRA).
Por estos días, el Club de París
[1] presiona a nuestro país para sufragar la deuda que tiene. Si bien no me gusta hacer revisionismo histórico, ni hecho errores políticos en cara…Fue el ex presidente Kirchner quien decidió no pagar la deuda externa, más cuando asumió la benemérita actual mandataria en menos de un año se vedaron exportaciones de carne (para saturar el mercado interno) y se incrementaron las exportaciones de oleaginosas (en especial la soja) un 15%, llegando a una confiscación del 44% sobre las ganancias de los productores sin discriminación de capacidad productiva.
La justificación a estas decisiones fue una pregunta- ¿cómo quieren que paguemos deuda externa sino?- dicho por Néstor en 2008 en uno de esos actos masivos, a los que la gente concurre “voluntariamente” en colectivos pagados por punteros varios.
¿En cuánto se han incrementado los gastos del estado desde que están el poder? ¿Cuál es la principal vía de egresos? ¿Por qué se le destinó más dinero a la televisación de fútbol en un año que a la partida presupuestaria de educación y salud? Estas últimas dos en miras del próximo año resultan menesterosas.
Es posible que nuestro Estado esté al borde de la quiebra, pero no por pagar en cómodas cuotas el dinero de quien lo ahorró a lo largo de 30 años de trabajo. Sin contar la malversación de fondos del día a día, como las obras que se anuncian 3, 4, 5 veces y nunca inician, o las cuantiosas sumas que destinan a la publicidad oficial, haciendo apología del personalismo.
Entonces ¿realmente quiebra el Estado? O en su defecto, la intención solapada es utilizar el dinero para hacer más clientelismo, apología de la desidia, del despojo intelectual y el atraso.

[1] Una agrupación de acreedores cuya finalidad es la de organizar formas de pago para los países deudores, como así también efectuar reestructuraciones de deuda. Aquellos países deudores que entran en cesación de pago con el Club de París se exponen a una represalia velada del mundo financiero, consistente en un corte automático de créditos que contribuyan a paliar una crisis. Es desde esta perspectiva que pueden cuestionarse las intenciones altruistas que ostenta esta organización que constituye una significativa acumulación de Poder. Fuente: Definiciones sobre "El Club de Paris".